Si algún día me olvidas, o un soplo dispersa mi recuerdo,
la memoria te es hoja de otoño
o las horas te dicen: “¡Basta!!”
la memoria te es hoja de otoño
o las horas te dicen: “¡Basta!!”
Sabrás que tu libertad es proa de acero,
es quilla a la fuga sin límite alguno
y vale más que todo amor y ternura
es quilla a la fuga sin límite alguno
y vale más que todo amor y ternura
No importa si a cicatriz abierta,
la herida al fogón se quema,
o torbellinos de luz sean el fuste
para golpear mi desolación
Si decir una plegaria es más difícil
a vendar lo irreparable
o ya no exista el sol para mis huesos
Si me olvidas o te marchas
no olvides llevar contigo ese atajo de nada
la herida al fogón se quema,
o torbellinos de luz sean el fuste
para golpear mi desolación
Si decir una plegaria es más difícil
a vendar lo irreparable
o ya no exista el sol para mis huesos
Si me olvidas o te marchas
no olvides llevar contigo ese atajo de nada
Si dices: ya basta – tendrás razón
Con barcas de batalla y labios partidos
ya sabré entonces qué hacer,
Con barcas de batalla y labios partidos
ya sabré entonces qué hacer,
con esas dos palabras
que jamás inserté
en tu alma
2 comentarios:
Saludos, Maestro. Como siempre, nadie pudo decir mejor lo que dice su poema. La emoción me colma y eso es suficiente para que la vida vuelva a recuperar el sentido último, el de vivir enamorada, ese que nada puede destruir, ese que nunca buscará razones ni excusas. Que tenga una buena tarde, Maestro. Que esté bien, feliz y en paz.
Nacho, te leo y te veo, hace tiempo que no platicamos...
tu poesía me acerca
Manolo.
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