Encuentra a tus autores aquí

lunes, marzo 26, 2007

Nancy Alejandra Ortiz Ochoa: Holanda


Holanda: Laboratorio Social
Por Nancy Alejandra Ortiz Ochoa
Alumna de Sociología SEA UV

El laboratorio

Holanda es un país curioso para el resto del mundo, cuando queremos hablar de un país desarrollado o raro siempre lo tomamos de ejemplo. Nos sorprende que los gay puedan casarse, que la eutanasia este permitida, que sus gobernantes vayan en bicicleta al trabajo y sobre todo que la marihuana sea “legal”. Un buen amigo holandés dice “no es que Holanda sea muy civilizada, simplemente no nos interesa que hace el otro y por eso casi todo es permitido”. El sociólogo catalán Manuel Castells dice que en el mundo se esta viviendo un proceso de ensimismamiento y que eso ocasiona indiferencia incluso para la confrontación, en tal sentido él lo encuentra peligroso pues opina que eso detiene la evolución de las sociedades. Algo similar podría estar ocurriendo en Holanda, donde uno de los principales problemas que encuentra el gobierno es que la gente no se saluda, leyeron bien, la gente no se saluda y el gobierno lo considera un problema nacional. Otro “problema” es la falta de cortesía en las salas de chat por Internet, tan grave lo consideran, que el gobierno mando a instalar anuncios publicitarios en los paraderos de camión donde le pide a los holandeses que se comporten amablemente cuando están navegando por la Internet. Ya quisiera México ese tipo de problemas.

Papa Gobierno


El gobierno Holandés parece ser un buen ejemplo de lo que algunos consideran un gobierno populista, pues si no tienes casa el ayuntamiento de tu ciudad te proporciona un departamento. Los holandeses se quejan un poco de que las casas no son muy bonitas, pues se parecen un poco a los departamentos de interés social que hay en México, con la diferencia que en Holanda son mucho más bonitos, más grandes, mejor hechos y mejor ubicados. También existe un seguro de desempleo que se encarga de mantenerte hasta que logres encontrar trabajo, muchos holandeses viven de esas prestaciones toda su vida.
Otra de las características del gobierno holandés, es la eficiencia que hay en sus oficinas y dependencias de gobierno, los trámites son muy rápidos y atienden en menos de 10 minutos. Los holandeses están tan acostumbrados a que el gobierno resuelva sus problemas que si un día de verano se le ocurre ser demasiado caluroso, los holandeses hablan a las dependencias de gobierno para pedir que hagan algo al respecto, pero lo más curioso es que seguramente el gobierno holandés considera esas demandas seriamente.


País de caricatura


Holanda parece ser una permanente postal, un país de caricatura, con sus casitas de techos puntiagudos, sus gatos gordos, manzanas colgando de los árboles, sus caminitos para las bicicletas, sus calles limpias, sus abejorros peludos y de colores brillantes, en fin, todo en perfecto orden. Un orden tan perfecto que a los latinos nos asusta.
La bicicleta es el transporte predilecto de los holandeses, hay carriles especiales para ellas, con señalamientos especiales, tal vez sobre decir que la bicicleta tiene preferencias sobre el automóvil al momento de conducir y los peatones tienen preferencia ante las bicicletas.
Las ciudades en Holanda son muy cercanas entre si. 15 minutos en tren y nos encontramos en otra ciudad con características y personalidad diferente.
Hay una pequeña pero bella ciudad de pescadores llamada Volendam, donde es popular comer arenque (pescado) crudo acompañado con cebolla, oliva o algún tipo de aderezo, para ser honesta, quién escribe no encontró este platillo muy exquisito que digamos.


Ámsterdam


La ciudad más popular y grande de Holanda. Es una ciudad muy moderna y cosmopolita, el idioma menos escuchado es el neerlandés.
La ciudad se caracteriza por sus canales, donde hay pequeñas embarcaciones acondicionadas como casas. Y otras embarcaciones destinadas al paseo de los turistas.
A los suburbios la ciudad se torna ultramoderna, los edificios se caracterizan por la rareza de sus diseños, para los holandeses el diseño y el arte son importantes, entre más raro sea algo, más “artístico” lo encuentran.
La ciudad tiene museos famosos como el de Vincent Van Gogh y Rembrandt, donde se muestran obras de los famosos pintores. Hay uno que no es tan bonito y culto como los anteriores, pero es entretenido y divertido para los turistas, es el Museum of sex, donde se muestran cosas relacionadas con el sexo a lo largo de la historia, ahí uno descubre o corrobora que los más locos para el sexo son los orientales.
Otra de las características de la ciudad son los coffee shops, donde la principal mercancía que venden es la canabbis en un sin fin de presentaciones y variaciones. Tal vez por esa razón el centro de la ciudad huele constantemente a mota, ya que es permitido consumirla incluso en la calle. Consumir Marihuana no es legal, sin embargo está permitido. El consumo de esta droga es frecuente entre los jóvenes pero no todos la consumen de manera habitual.
Una atracción más es la zona roja, es el sitio más visitado en Ámsterdam, hay gente de todo el mundo, algunos transeúntes llevan atuendos raros, otros simplemente prefieren andar en trajes de baño, sin pantalones o sombreros locos.
Las prostitutas se exhiben en lujosas vitrinas, ellas se encuentran caracterizadas, disfrazadas o en diminuta lencería, las hay de todos los colores, tamaños y formas. En la zona hay centros nocturnos donde se presentan diversos shows incluso de sexo en vivo. Ámsterdam es un sitio visitado por grupos de jóvenes de todo el mundo, pues es un lugar relacionado con mucha droga y sexo.
En Ámsterdam hay muchos centros nocturnos, con gran variedad de conceptos, están los centros para intelectuales donde se escucha mezcla de jazz con música electrónica. En las discotecas no puede faltar la clásica Lambada, que es considerada una canción especial para el verano, incluso hay centros para latinos, donde se juntan algunos holandeses con colombianos, dominicanos, cubanos, puertorriqueños, mexicanos, etc. Muchos están de paseo, otros radican allá, algunos son inmigrantes ilegales en holanda.
Los holandeses caucásicos, ¡pobres!, no tienen nada de ritmo, inventaron un bailecito hace algunos años que es una especie de zapateado pero sin ritmo, a los latinos nos cuesta mucho trabajo bailarlo, pues hay que quitarle el ritmo para poder bailar como ellos.
Holanda es un país que puede ofrecer mucho, parece que hay de todo, incluido un frío aterrador.

No hay comentarios.: