La búsqueda espiritual de John Lennon
Por Ignacio García
(Segunda y última parte)
(Ver primera parte)
(Ver primera parte)
En nuestra entrega anterior, dejamos a Yoko Ono con su objetivo de alejar a Lennon de otras influencias que no fueran las suyas propias. Para estos tiempos, la vida del ex - Beatle estaba fuera de control; preocupado por su salud y vista, y otros asuntos como invertir bien su dinero, además de su seguridad personal.
La única solución (planteada por la Ono) fue pagar los servicios de gente que pretendía adivinar el futuro. Pero ¿en quiénes podría confiar Lennon? La situación empeoró pues las predicciones del astrólogo contradecían a la lectora del tarot y, a ésta los psíquicos y demás horda de embusteros. En vez de la libertad buscada al separarse del resto de los Beatles, ahora Lennon se hallaba realmente esclavizado. No iba a ningún lado sin ser aconsejado por algún gurú de utilería; no hacía nada sin conocer la señal de su estrella natal ni realizaba plan alguno sin antes acercarse al I Ching.
El colmo fue éste. En enero de 1979, influenciado por Yoko, viajaron a El Cairo donde se sabía de una excavación arqueológica ilegal que se estaba llevando a cabo. Yoko y John creían que algunos antiguos artefactos egipcios contenían poderes mágicos, y Yoko había dedicado una de sus habitaciones a esos objetos: “¡Amo los tesoros egipcios! –decía la supersticiosa mujer--, no por su valor como tales, sino por sus poderes mágicos. Cada pieza posee un cierto poder mágico”. Ellos permanecieron en el Nilo Hilton Hotel y viajaron a las pirámides…hasta que el gobierno egipcio supo de sus intenciones y les fue advertido que no volvieran a las excavaciones.
Por aquellos tiempos Frederic Seaman llegó a ser el asistente personal de John, cuyo mayor interés estaba centrado en leer libros sobre religión, fenómenos físicos, ocultismo, asuntos sobre la muerte, historia, arqueología y antropología. Libros específicos recordados por Seaman, son: Rebel in the Soul: An Ancient Egyptian Dialogue Between a Man and His Destiny, de Bika Reed; Drawing Down the Moon: Witches, Druids, Goddess Worshippers, and Other Pagans in America Today, de Margot Adler; y Practical Occultis de (Madame) H. P Blavatsky.
El colmo fue éste. En enero de 1979, influenciado por Yoko, viajaron a El Cairo donde se sabía de una excavación arqueológica ilegal que se estaba llevando a cabo. Yoko y John creían que algunos antiguos artefactos egipcios contenían poderes mágicos, y Yoko había dedicado una de sus habitaciones a esos objetos: “¡Amo los tesoros egipcios! –decía la supersticiosa mujer--, no por su valor como tales, sino por sus poderes mágicos. Cada pieza posee un cierto poder mágico”. Ellos permanecieron en el Nilo Hilton Hotel y viajaron a las pirámides…hasta que el gobierno egipcio supo de sus intenciones y les fue advertido que no volvieran a las excavaciones.
Por aquellos tiempos Frederic Seaman llegó a ser el asistente personal de John, cuyo mayor interés estaba centrado en leer libros sobre religión, fenómenos físicos, ocultismo, asuntos sobre la muerte, historia, arqueología y antropología. Libros específicos recordados por Seaman, son: Rebel in the Soul: An Ancient Egyptian Dialogue Between a Man and His Destiny, de Bika Reed; Drawing Down the Moon: Witches, Druids, Goddess Worshippers, and Other Pagans in America Today, de Margot Adler; y Practical Occultis de (Madame) H. P Blavatsky.
Lennon gastaba también grandes sumas de dinero en cintas con lecturas de un gurú occidental del budismo zen llamado Allan Wats.
De vacaciones en Florida, Lennon volvió a ver el Jesús de Nazareth de Zeffirelli por ser temporada de pascuas. La reacción de Lennon en aquella ocasión fue muy diferente a la anterior; se mofó e hizo chistes acerca de la crucifixion de Jesús, y a vociferar contra el cristianismo, diciendo que éste virtualmente destruyó la cultura y espiritualidad pagana de Europa, arrojando una périda irreparable. Fue entonces que dijo que se había “convertido de nuevo en pagano”.
Más tarde, en el año en que Bob Dylan grabó Slow Train Coming, (que habla de la aparente conversión de Dylan al cristianismo). El álbum va directo: no sólo es una alabanza a Jesús sino un ataque a sus opositores, sean éstos sincretistas, falsos profetas, o gente con falta de compromiso. Lennon lo tomó como una allusion directa a él. En la pieza llamada Precious Angel, Dylan dice: "O llegas a tener fe o eres un inconverso: no existen los terrenos neutrales” (1)
La conversion de Dylan tomó a Lennon por sorpresa; después de todo Dylan había sido un músico-colega famoso y de gran respeto para Los Beatles.
Cuando en 1980 se le preguntó a Lennon acerca de la conversión de Dylan, su respuesta no parece haber estado exenta de cierta mofa; contestó que le sorprendía que “el viejo-muchacho Bobby hubiera tomado ese camino...Pero, sí él lo necesita, déjenlo que lo haga”. Y agregó: “No existe respuesta para nada en este mundo”. En su respuesta transmitía Lennon su preferencia por el budismo, el cual no ejercita el proselitismo religioso. Y, en lo que parece ser una alusión a su período de conversión anterior, Lennon apuntó: “Pero entiendo. Entiendo perfectamente el porqué Bob ha tomado esa decisión; el cómo llegó allí, porque yo he estado lo suficientemente temeroso como para echarme a la búsqueda de 'algo' también".
Los sentimientos íntimos acerca de su conversión, fueron expresados por Lennon en la escritura de sus canciones; especialmente en Gotta Serve Somebody, la que supone una versión personal de que no existe una sola verdad en este mundo. La letra incide en la posición de que, cualquiera sea tu situación en la vida, estarás sirviendo ya sea a Dios, ya sea al Diablo: la elección es inevitable. John escribió también, a manera de auto respuesta, una canción de título Serve Yourself, con el argumento de que nadie puede salvarte de situación alguna.
De vacaciones en Florida, Lennon volvió a ver el Jesús de Nazareth de Zeffirelli por ser temporada de pascuas. La reacción de Lennon en aquella ocasión fue muy diferente a la anterior; se mofó e hizo chistes acerca de la crucifixion de Jesús, y a vociferar contra el cristianismo, diciendo que éste virtualmente destruyó la cultura y espiritualidad pagana de Europa, arrojando una périda irreparable. Fue entonces que dijo que se había “convertido de nuevo en pagano”.
Más tarde, en el año en que Bob Dylan grabó Slow Train Coming, (que habla de la aparente conversión de Dylan al cristianismo). El álbum va directo: no sólo es una alabanza a Jesús sino un ataque a sus opositores, sean éstos sincretistas, falsos profetas, o gente con falta de compromiso. Lennon lo tomó como una allusion directa a él. En la pieza llamada Precious Angel, Dylan dice: "O llegas a tener fe o eres un inconverso: no existen los terrenos neutrales” (1)
La conversion de Dylan tomó a Lennon por sorpresa; después de todo Dylan había sido un músico-colega famoso y de gran respeto para Los Beatles.
Cuando en 1980 se le preguntó a Lennon acerca de la conversión de Dylan, su respuesta no parece haber estado exenta de cierta mofa; contestó que le sorprendía que “el viejo-muchacho Bobby hubiera tomado ese camino...Pero, sí él lo necesita, déjenlo que lo haga”. Y agregó: “No existe respuesta para nada en este mundo”. En su respuesta transmitía Lennon su preferencia por el budismo, el cual no ejercita el proselitismo religioso. Y, en lo que parece ser una alusión a su período de conversión anterior, Lennon apuntó: “Pero entiendo. Entiendo perfectamente el porqué Bob ha tomado esa decisión; el cómo llegó allí, porque yo he estado lo suficientemente temeroso como para echarme a la búsqueda de 'algo' también".
Los sentimientos íntimos acerca de su conversión, fueron expresados por Lennon en la escritura de sus canciones; especialmente en Gotta Serve Somebody, la que supone una versión personal de que no existe una sola verdad en este mundo. La letra incide en la posición de que, cualquiera sea tu situación en la vida, estarás sirviendo ya sea a Dios, ya sea al Diablo: la elección es inevitable. John escribió también, a manera de auto respuesta, una canción de título Serve Yourself, con el argumento de que nadie puede salvarte de situación alguna.
Cierto. En diciembre de 1980, Mark Chapman daba la razón al músico genial y dejaba a los fans de Lennon sin conocer si por fin había éste hallado ese recoveco del alma al que William James reconoce como un despertar súbito.
(1) Como una alusión a la frase de Apocalipsis en donde se dice: "O eres frío o caliente, porque a los tibios los vomito"
2 comentarios:
Nacho: He leído con sumo interés tu colaboración y me ha parecido estupenda. La verdad, desde hace tiempo no creo en las coincidencias, y por diversas razones he aprendido a entender que los vínculos espirituales, afectivos y sociales son una realidad que supera las expectativas y posibilidades de raciocinio de quienes fungimos como nodos en esa gran telaraña de significación, como diría Geertz, que diariamente tejemos. Ayer tropecé en el escritorio con el Disco Compacto The John Lennon Collection y lo he escuchado nuevamente. Hoy, abrí el correo y hallé el mensaje con la alusión a la búsqueda espiritual del líder de los Beatles. Precisamente, me preguntaba ayer, por todo lo que en realidad expresan sus canciones y letras, no en estricto sentido denotativo, sino en la profundidad y la raíz primigenia de lo que un ser humano puede llegar a pensar, sufrir y vivir. Ahora, leyendo tus letras, vuelve a hacer click el link en la telaraña: hace una semana le echaba un ojo a un libro colectivo sobre el cristianismo y el génesis de la cultura occidental. La hipótesis es que, querámoslo o no, la propuesta filosófica de Jesús, el humilde carpintero, ha permeado nuestra cosmovisión durante casi 2000 mil años. En fin, de esas y otras cosas está hecha la vida. Recibe un cordial saludo y un cálido abrazo. Tino Ventura
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