Los ministros de Exteriores de España y China, Miguel Ángel Moratinos y Yang Jiechi, evitaron en su reunión de ayer en Pekín cualquier alusión a Tíbet y a la decisión del juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz de investigar, en aplicación del principio de justicia universal, la posible responsabilidad de siete políticos y militares chinos, entre los que hay dos ministros, en presuntos delitos de lesa humanidad cometidos durante la represión de los disturbios registrados en marzo pasado. A dos días del comienzo de los Juegos Olímpicos, las autoridades chinas prefirieron obviar este asunto y señalaron que España es hoy su socio preferente en Europa.
En el encuentro, que se prolongó durante cuarenta minutos y al que también asistió el ministro de Industria, Miguel Sebastián, Jiechi dijo que «España es el mejor aliado de China en la UE». El jefe de la diplomacia china se mostró «muy satisfecho por la confianza mutua que se profesan ambos países» y saludó «con entusiasmo» la alianza estratégica que ambos gobiernos firmaron durante la visita que José Luis Rodríguez Zapatero hizo a Pekín en julio de 2005. En la reunión de ayer, ambos dignatarios acordaron crear un grupo de trabajo hispano-chino que impulse las relaciones entre Europa y el gigante asiático de cara a la presidencia europea que España ejercerá en el primer semestre de 2010.
Fuentes gubernamentales españolas celebraron que el ministro chino decidiera no comentar la decisión de la Audiencia Nacional, porque podría enturbiar la relación entre ambos países en un momento en que España tiene muchas papeletas para convertirse en socio comercial preferente de China. El Gobierno confiaba en que esta reunión sirviese como «termómetro» para medir «la reacción» de la diplomacia china al auto del juez Pedraz. «En ningún momento se hizo referencia a caso específico alguno, ni siquiera al del martes en la Audiencia Nacional», subrayó Moratinos tras el encuentro.
Visita de Zapatero
Moratinos y Jiechi debatieron también la posibilidad de un futuro intercambio de visitas de alto nivel. En concreto, abordaron la posible asistencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, a la cumbre de la UE con los países asiáticos de la conferencia ASEM, que se celebrará en Pekín en octubre, y una probable visita a España del primer ministro chino, que según Moratinos podría realizarse «este año o el siguiente».
Los responsables españoles de Exteriores e Industria mantuvieron otra reunión con el ministro chino de Comercio, Chen Deming, con el objetivo de potenciar las relaciones comerciales, la inversión recíproca y el naciente turismo del país asiático. Según las fuentes consultadas, en ese encuentro se analizaron «multitud de temas que preocupan a las empresas e intereses españoles en China, empezando por el déficit en los intercambios» comerciales. En el período de enero a mayo de 2008, España exportó a China productos y servicios por valor de 953,8 millones de euros e importó por 8.133,7 millones, sobre todo en ropa, calzado, muebles y productos para el hogar. «Los interlocutores chinos han reiterado que quieren que ese déficit no exista, que haya un incremento de los intercambios y se equilibre la balanza», explicaron fuentes españolas.
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