Buen primer mes: arte y sociedad
Jaime Velázquez
¿Cómo nos percibimos, en términos de dinero? Si tenemos trabajo, casa, coche y vacaciones, nos creemos afortunados, somos gente feliz. Con los excedentes pagamos colegios, hospitales y restaurantes. Pero no nos comparemos con la gente feliz de países prósperos porque salimos perdiendo: nuestra casa es modesta, pagamos en plazos el coche y las vacaciones, etc., y millones de gentes no tienen esto. Así que no nos alegra mucho el inalcanzable concierto de Led Zeppelín que cerró el año 2007, que nos hubiera costado avión-hotel-boleto de entrada a la Arena O2 de Londres. De todos modos, para mi historia personal, el año 2007 terminó con Page (63 años), Jones (61), Plant (59) y el hijo de Bonham (41) frente a 16 mil espectadores. Y, bueno, millones de personas no estuvimos en la O2, pero vamos a comprar el disco y por eso pensamos con optimismo que cerró muy bien el año 2007.
¿Y cómo va este 2008? No cabe duda que será un buen año, a pesar del desastre económico que está dejando Bush. En la ciudad de Veracruz, enero no pudo ser mejor. Se fueron los panistas, aunque dejaron un tiradero en el estacionamiento a espaldas de Benito Juárez, en el camellón de la avenida Díaz Mirón, frente a Chedraui; tiradero, incluso en el nuevo edificio que no pareció cambiar nada el viejo mercado de pescadería, con sus miserables localitos asomados a una calle pobre y maloliente. Pero regresaron los priístas aunque se nota que quieren hacer un buen papel.
En cultura, los panistas dejan un estancamiento de trece años. Los priístas empezaron por colocar un director de cultura joven, Luis Fernando Ruz, con ganas de recuperar el tiempo perdido, esperamos que con amplitud de miras.
Enero empezó con el lujo de la magna presentación de un libro, la más concurrida que yo haya visto, en el teatro Clavijero. Jorge Alberto González hizo una recopilación de artículos y entrevistas publicados en este periódico a lo largo de seis años, Recuerdos y recuentos periodísticos. La gala, también la de más duración, incluyó a cantantes y bailarines.
En Casa Principal, Ivonne Moreno disertó acerca de San Sebastián, patrono de la ciudad y puerto de Veracruz, desde el punto de vista de las artes plásticas.
En el centro Veracruzano de las Artes (Cevart) se reanudaron las actividades con un libro de la doctora Flores, auspiciado por la Unión de Escritores Veracruzanos; leyeron textos de análisis Martha Elsa Durazzo, Reynaldo Carballido y leyó sus poemas la autora. Y el miércoles 30 hubo una velada literaria, casi de Carnaval, alrededor de una novela de mucha categoría, de Armando Briseño, Parque Salzburgo, publicada por el Instituto Veracruzano de Cultura (Ivec).
El periódico Imagen celebró los doscientos números de la sección Galería Cultural, animada por Carolina Cruz, y publicó, entre otros asuntos, dos entrevistas de la editora de la Galería, Josefina Lugo, una con Sergio Villasana, director del Ivec, y otra con Alejandro Schwartz, director del Cevart, así como una entrevista de Jorge Alberto González con Luis Fernando Ruz, director de Cultura del H. Ayuntamiento, quienes hablaron de sus planes para este año.
Jorge Alberto González entrevistó también a Maruchi Bravo Pagola, directora de Actividades Artísticas y Culturales de la Secretaría de Educación de Veracruz (Sev), que propone rescatar la Alameda Díaz Mirón para presentar actividades artísticas. Recordemos que ella encabezó la entrega de ayuda económica a un buen número de artistas veracruzanos.
Hacia fines de enero se dio a conocer el nombramiento de Miguel Salvador Rodríguez Azueta, abogado y novelista, como director del Museo de la Ciudad.
Mientras, un grupo de artistas y escritores (Lourdes Azpiri, Manuel Salinas, Ignacio García, Sergio Peregrina y otros) continuaron con la promoción del “renacimiento cultural” de la ciudad de Veracruz, para lo cual han organizado reuniones con los colegas y con las autoridades estatales y municipales, en un afán de concertar acciones que tienen el mismo objetivo, la educación artística, el desarrollo de los artistas, la divulgación del arte veracruzano, etc.
Pero México es un país pobre y alejado de la Arena O2, así que el despegue pasa por involucrar a zonas alejadas del centro de la ciudad, lo que el H. Ayuntamiento de Veracruz ya está haciendo.
Este enero, con la instalación de un nuevo gobierno municipal, fue sin duda un buen inicio de año. En televisión (Canal 22) vimos una película del suizo Alain Tanner, Réquiem, en la que el personaje busca a su padre, a su mejor amigo, a su amada, al tiempo que recorre una ciudad sorprendente, Lisboa, y encuentra fugazmente al poeta Fernando Pessoa: todos fantasmas, como los de Juan Rulfo y Comala.
En radio, el asunto del silenciamiento de Carmen Aristegui de la W (a.m.) ocasionó que miles de personas dejaran de sintonizar esa estación, con la consiguiente pérdida de penetración publicitaria y la pérdida de control del pensamiento del público, que allí se expresaba y que ahora se informa y se comunica en silencio, por celulares, Internet y otros medios que sobreviven al panismo postfoxista, que en un año desgastó y sustituyó a su secretario de Gobernación.
Jaime Velázquez
¿Cómo nos percibimos, en términos de dinero? Si tenemos trabajo, casa, coche y vacaciones, nos creemos afortunados, somos gente feliz. Con los excedentes pagamos colegios, hospitales y restaurantes. Pero no nos comparemos con la gente feliz de países prósperos porque salimos perdiendo: nuestra casa es modesta, pagamos en plazos el coche y las vacaciones, etc., y millones de gentes no tienen esto. Así que no nos alegra mucho el inalcanzable concierto de Led Zeppelín que cerró el año 2007, que nos hubiera costado avión-hotel-boleto de entrada a la Arena O2 de Londres. De todos modos, para mi historia personal, el año 2007 terminó con Page (63 años), Jones (61), Plant (59) y el hijo de Bonham (41) frente a 16 mil espectadores. Y, bueno, millones de personas no estuvimos en la O2, pero vamos a comprar el disco y por eso pensamos con optimismo que cerró muy bien el año 2007.
¿Y cómo va este 2008? No cabe duda que será un buen año, a pesar del desastre económico que está dejando Bush. En la ciudad de Veracruz, enero no pudo ser mejor. Se fueron los panistas, aunque dejaron un tiradero en el estacionamiento a espaldas de Benito Juárez, en el camellón de la avenida Díaz Mirón, frente a Chedraui; tiradero, incluso en el nuevo edificio que no pareció cambiar nada el viejo mercado de pescadería, con sus miserables localitos asomados a una calle pobre y maloliente. Pero regresaron los priístas aunque se nota que quieren hacer un buen papel.
En cultura, los panistas dejan un estancamiento de trece años. Los priístas empezaron por colocar un director de cultura joven, Luis Fernando Ruz, con ganas de recuperar el tiempo perdido, esperamos que con amplitud de miras.
Enero empezó con el lujo de la magna presentación de un libro, la más concurrida que yo haya visto, en el teatro Clavijero. Jorge Alberto González hizo una recopilación de artículos y entrevistas publicados en este periódico a lo largo de seis años, Recuerdos y recuentos periodísticos. La gala, también la de más duración, incluyó a cantantes y bailarines.
En Casa Principal, Ivonne Moreno disertó acerca de San Sebastián, patrono de la ciudad y puerto de Veracruz, desde el punto de vista de las artes plásticas.
En el centro Veracruzano de las Artes (Cevart) se reanudaron las actividades con un libro de la doctora Flores, auspiciado por la Unión de Escritores Veracruzanos; leyeron textos de análisis Martha Elsa Durazzo, Reynaldo Carballido y leyó sus poemas la autora. Y el miércoles 30 hubo una velada literaria, casi de Carnaval, alrededor de una novela de mucha categoría, de Armando Briseño, Parque Salzburgo, publicada por el Instituto Veracruzano de Cultura (Ivec).
El periódico Imagen celebró los doscientos números de la sección Galería Cultural, animada por Carolina Cruz, y publicó, entre otros asuntos, dos entrevistas de la editora de la Galería, Josefina Lugo, una con Sergio Villasana, director del Ivec, y otra con Alejandro Schwartz, director del Cevart, así como una entrevista de Jorge Alberto González con Luis Fernando Ruz, director de Cultura del H. Ayuntamiento, quienes hablaron de sus planes para este año.
Jorge Alberto González entrevistó también a Maruchi Bravo Pagola, directora de Actividades Artísticas y Culturales de la Secretaría de Educación de Veracruz (Sev), que propone rescatar la Alameda Díaz Mirón para presentar actividades artísticas. Recordemos que ella encabezó la entrega de ayuda económica a un buen número de artistas veracruzanos.
Hacia fines de enero se dio a conocer el nombramiento de Miguel Salvador Rodríguez Azueta, abogado y novelista, como director del Museo de la Ciudad.
Mientras, un grupo de artistas y escritores (Lourdes Azpiri, Manuel Salinas, Ignacio García, Sergio Peregrina y otros) continuaron con la promoción del “renacimiento cultural” de la ciudad de Veracruz, para lo cual han organizado reuniones con los colegas y con las autoridades estatales y municipales, en un afán de concertar acciones que tienen el mismo objetivo, la educación artística, el desarrollo de los artistas, la divulgación del arte veracruzano, etc.
Pero México es un país pobre y alejado de la Arena O2, así que el despegue pasa por involucrar a zonas alejadas del centro de la ciudad, lo que el H. Ayuntamiento de Veracruz ya está haciendo.
Este enero, con la instalación de un nuevo gobierno municipal, fue sin duda un buen inicio de año. En televisión (Canal 22) vimos una película del suizo Alain Tanner, Réquiem, en la que el personaje busca a su padre, a su mejor amigo, a su amada, al tiempo que recorre una ciudad sorprendente, Lisboa, y encuentra fugazmente al poeta Fernando Pessoa: todos fantasmas, como los de Juan Rulfo y Comala.
En radio, el asunto del silenciamiento de Carmen Aristegui de la W (a.m.) ocasionó que miles de personas dejaran de sintonizar esa estación, con la consiguiente pérdida de penetración publicitaria y la pérdida de control del pensamiento del público, que allí se expresaba y que ahora se informa y se comunica en silencio, por celulares, Internet y otros medios que sobreviven al panismo postfoxista, que en un año desgastó y sustituyó a su secretario de Gobernación.
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